Ramón Valle es uno de los referentes indiscutibles del jazz latino del nuevo siglo. Estudiante de piano desde muy niño, primero en su Holguín natal y más tarde en la Escuela Nacional de Arte de La Habana, pronto comenzó su carrera como profesional alternando su faceta de solista con la de director de algunas orquestas ligadas al movimiento de la Nueva Trova.

Su profundo dominio de la esencia africanista de la música cubana y la técnica prodigiosa que atesora, junto a su singular personalidad, le convierten en uno de los músicos fundamentales del jazz latino. Cucho Valdés dijo hablando de él que era “uno de los talentos más grandes entre los jóvenes pianistas”, y efectivamente, la crítica mundial ha destacado como poderosa y espiritual a la vez su propuesta.