Maka
Francisco Javier Rodríguez Morales se crió en el corazón de la temida 'Zona Norte' de Granada, en Almanjáyar y Rey Badis, una de las barriadas más deprimidas (y abandonadas) de Andalucía, junto con Las 3000 Viviendas y Palma Palmilla. Con antecedentes musicales en su familia -su abuelo era cantaor, su hermano le introdujo en el Hip Hop-, el tiempo y las 'circunstancias' hicieron lo demás.
Maka pasó de ser un rapero semidesconocido a ser uno de los nombres destacables de la película 'Esperanza se escribe con H', dedicado a diversos raperos recluidos en distintas cárceles estatales. Su contribución tuvo la ayuda del técnico y productor Bejeta, miembro de la Real Academia del Verso (grupo seminal del rap en Granada) y técnico de gira de Hora Zulú. Ya el Maka fue noticia al gozar de un permiso penitenciario para poder actuar en la sala Tren, en el arranque público de una carrera de éxito.
Luego llegaría 'P.N.A'. (siglas de Polígono Norte Almajanyar) 'PVREZA' y 'Makanudo'. Su más reciente trabajo: 'Raíces', es el que mejor le define, cuajando todas las influencias que le han llegado de todos lados, las del Hip hop y el Flamenco, sí, pero también Trap, Reggaetón, R&blues o Salsa.
Y junto a su socio Dellafuente (mejor pieza rap 2107 para RDL) tiene abierta otra línea de trabajo: “Quejios y Autotune” fue el título de la gira conjunta que realizaron por toda España en 2017 ofreciendo más de 50 conciertos con un 80% de “sold outs”.
Con su último álbum, Gloria Bendita, Maka ha vuelto a sorprender a sus seguidores con canciones que mezclan el rap con sonidos más flamencos y reggaetoneros. Temas como Te comía o Lo Justo ya son grandes éxitos en plataformas como Spotify o YouTube.